martes, 19 de febrero de 2008

THE TINIEST OF THE MOHICANS


Tome usted el gorro desprendible de una chamarra peluda, colóquelo sobre su cabeza y ¡voila!, he ahí un nuevo peinado. Algo ochentero, pero no podemos quejarnos, cubre el cráneo y con eso basta.




2 comentarios:

Di. dijo...

Me hiciste reír tanto que hasta un ataque de tos me dio. Te ves muy condechi!
Besos!

Jorge Tovalín González-Iturbe dijo...

jaja, muy Condechi.

Muchas gracias por visitar el blog, lindura de pequeñuela